63. Defiendan la Verdadera Palabra de Dios — 15.03.2013
Mi hija. Mi amada hija. Yo, tu Madre en el Cielo, te amo mucho a ti y a tus seres queridos. No tengan miedo nunca, porque están protegidos. Di a ….. que le estamos agradecidos por su maravilloso trabajo. Esperamos con alegría su regreso, y si él lo desea, a otro trabajo conjunto.
Mi hija. No te desesperes. Todo es para el mayor beneficio de ustedes. Incluso las pruebas difíciles (puede que así las perciban en este momento) sirven para fortalecer la confianza en Mi Hijo, Jesucristo. Cuanto más confíen en Él, más resistentes contra los «ataque» se volverán, es decir, no importa lo que pase ustedes podrán aceptarlo con amor, devoción e incluso alegría.
Mis hijos. Mis amados hijos. Nunca pierdan el coraje para proclamar Nuestra Palabra porque es Nuestra Palabra la que les estamos dando que salvará a millones de almas. Crean en Nosotros. Manténganse fuertes. Defiendan la Verdadera Palabra de Dios y Mi Hijo en todo momento.
Siempre estamos con ustedes y los protegemos. ¡Vivan, hijos Míos, vivan!
Los amamos de todo corazón.
Su amada Madre en el Cielo en unión con Mi amado Hijo. Amén.