589. ¡El más grande de todos los sacrificios por todos ustedes!

Mi hija. Mi querida hija. Por favor, diles lo siguiente a Nuestros hijos hoy:

Mi Hijo, su Jesús, los ama mucho. ¡ÉL hizo el sacrificio más grande por ustedes! ¡EL dio Su vida por cada uno de ustedes porque Su amor por ustedes es infinito! Aunque ÉL sabía cómo su mundo [el mundo de ustedes] y muchos de ustedes se alejarían de la fe en ÉL y en el Padre Todopoderoso en el Cielo, cómo LO desterrarían a ÉL, su Santo Salvador, y lo pisotearían, ¡ÉL dio Su vida, el más grande de todos los sacrificios, por todos ustedes!

Mis hijos. Hoy hay muchos de ustedes que están dando sus vidas por Jesús. Son perseguidos, torturados y sufren tormento mental y físico, ¡pero soportan todo esto por Jesús, el Salvador de todos ustedes! Ellos son verdaderos seguidores de Jesús, los hijos más fieles y el Padre los ama mucho. Dan su vida por su fe en el Salvador de ustedes y, por tanto, no sólo son los hijos más fieles del Señor, sino también corredentores de muchas, muchas almas que no habrían encontrado el camino hacia Jesús por sí solas.

Por eso, ¡en estos días oren especialmente por los mártires de su mundo! Oren para que estén capaces de ofrecer los tormentos que sufren en cada momento a Jesús y al Padre. Oren para que puedan permanecer fieles a Jesús a pesar de las mayores penurias. Oren por todos los hermanos y hermanas perseguidos en el Señor, y oren por la paz en su mundo y en los corazones de todos los hijos de Dios.

Ustedes son el Ejército Remanente del Señor aquí en la tierra, y como tal les pido que permanezcan unidos y oren unos por otros diariamente.

Les doy las gracias desde el fondo de Mi corazón, Mis tan amados hijos, y los bendigo a cada uno de ustedes con Mi Bendición Maternal.

Hasta pronto, Mis hijos y con profundo amor,

Su Madre en el Cielo que los ama.

Madre de todos los hijos de Dios y Madre de la Salvación. Amén.

Gracias por responder a Mi llamado. Amén.