590. ¡Todos tendrán que responder por sus mentiras y vergonzosos actos ante Dios! — 17.06.2014
Mi hija. Mi querida hija. Por favor, diles hoy a Nuestros hijos lo siguiente:
Su vida aquí en la tierra sirve como preparación para la Vida Eterna al lado de Dios Padre, el Altísimo, Creador de todo ser. ÉL, que los creó en el amor anhela su regreso. ÉL, que les envió Su Hijo, los ama tanto.
Mis hijos. ¡Aprovechen el tiempo que les queda en la tierra y encuentren el camino hacia el Señor! ¡Jesús es su camino! ¡ÉL es la luz que ilumina todas las tinieblas! ÉL es el Hijo del Padre Todopoderoso, su Salvador, ¡y sólo a través de ÉL encontrarán su camino a casa!
Mis hijos. ¡Vengan, vuelvan a Jesús y síganle a ÉL! ¡Nadie que haya dado su SÍ a Jesús se perderá! Pero aquellos que persiguen a Buda, Mahoma, esoterismo, Nueva Era, adivinación, tarot, lectura de manos y otros abracadabras, ¡tendrán un duro despertar!
Todos aquellos que lleven a Nuestros amados hijos “por el camino del engaño” tendrán que responder por sus mentiras y vergonzosos actos ante Dios, el Señor y Creador, y ay de aquel que venda almas al adversario: experimentará sufrimientos y grandes penurias y será atormentado eternamente con todo el pecado que el mismo haya cometido. Se dará cuenta -demasiado tarde- de que el diablo no es ni amigo ni socio, ¡y tendrá que vivir con el verdadero rostro de Satanás! Las llamas del infierno determinarán su eternidad, y las mayores penurias y el mayor tormento serán suyos.
Dios Padre: “Así que, vengan todos los que se han extraviado ahora a Mi Hijo, porque Mi misericordia es infinita y perdonaré a cada uno sus pecados si se arrepiente sinceramente de ellos.”
Mis hijos. Sólo Jesús es su camino hacia la Vida Eterna. Vuelvan a ÉL y empiecen a ser de nuevo verdaderos hijos del Señor.
Con profundo amor,
Su Madre en el Cielo.
Madre de todos los hijos de Dios y Madre de la Salvación. Amén.
“El Cielo está preparado para ustedes. Aprovechen y pidan la ayuda de los santos. Ellos les ofrecen protección y guía. Pero no esperen demasiado, pues el tiempo que aún se les concede es corto. Amén. Tu Madre del Cielo.”