604. ¡Escuchen Mi palabra, que resuena como un trueno desde el cielo!

Mi hija. Mi querida hija. Siéntate conmigo y escucha lo que Yo, tu Padre en el Cielo, tengo que decir hoy a los hijos de la tierra:

Su tiempo terrenal pasa muy deprisa, Mis tan amados hijos, y ustedes se están perdiendo en el mundo del consumismo, del lujo, de la briba y de los placeres. Ustedes creen que su vida está todo en orden mientras no hagan daño al prójimo, sin embargo, Mis tan amados hijos, esto es una trampa del diablo.

Ustedes no observan Mis mandamientos y no siguen las enseñanzas de Jesús. Aquí también el diablo les ha tendido trampas, porque están convencidos de que “esto” se aplicaba a tiempos pasados y ahora que viven con tanto lujo, logros y riquezas, que han “creado un mundo moderno”, todo esto ha perdido su significado o [incluso] ya no tiene ningún significado o que debería ser adaptado a su mundo de hoy, no obstante, Mis tan amados hijos, ¡es esta precisamente la trampa tendida por el diablo!

Mis mandamientos son válidos para todos los tiempos y si los cumplieran TODOS, ustedes serían hijos humanos felices, contentos y plenos y no buscarían su “plenitud” en lo exterior, en la autorrealización y el reconocimiento.

También las enseñanzas de Mi Hijo son válidas para todos los tiempos, porque les muestran el camino hacia Mí, su Creador en el Cielo. Quien no viva las enseñanzas de Mi Hijo no alcanzará el Reino de los Cielos y su camino lo conducirá directamente al abismo, a la condenación del demonio.

Mis hijos. Su vida aquí en la tierra sirve para prepararlos para la eternidad gloriosa en Mi Reino de los Cielos o, muy pronto, para el Nuevo Reino de Mi Hijo. Solo serán plenos y felices con Jesús. Nada en lo exterior les dará o puede darles felicidad duradera o amor duradero o plenitud duradera. ¡En Jesús encontrarán todo lo que buscan y estarán en paz, serán plenos y felices!

En su mundo material, sin embargo, nunca encontrarán la satisfacción y mucho menos la plenitud, porque esta está en Mi Hijo. Deben convertirse y dar la espalda a todo glamur y apariencias, ¡porque la “felicidad terrenal” es efímera y no los conducirá a Mí!

El diablo les tiende todas las tentaciones para que no encuentren el camino a casa, pero ustedes están tan atrapados en ustedes mismos, en su mundo terrenal y en las brumas del diablo, que caen cada vez más profundamente en sus trampas y aceptan y forman opiniones, ¡todas las cuales han sido y seguirán siendo glosadas y entregadas por el diablo!

¡Despierten! ¡Conviértanse! Porque el tiempo que les queda en esta tierra es corto y pronto, muy pronto, se acabará.

¡Mis plagas golpearán a muchos de ustedes si no se convierten!

¡Mi fuego quemará los lugares de pecado si no se convierten!

¡Y les quitaré un tercio de su tierra si no se convierten!

Mi Hijo está a la espera y ÉL vendrá primero como Salvador Misericordioso, luego como Juez sobre ustedes, y ¡ay de aquel que no se haya convertido para entonces!

Aléjense del pecado y de actos vergonzosos y conviértanse en dignos hijos Míos, de lo contrario su perdición estará sellada.

Escuchen Mi palabra, que resuena como un trueno desde el Cielo:

Yo, el Padre Todopoderoso, Creador de toda vida y Gobernante del Cielo y de la tierra y de todo lo que ES, ¡haré caer Mi ira sobre ustedes si no se convierten!

Sólo a través de Mi Hijo Jesucristo, Redentor del mundo, doy todavía Mi misericordia al mundo, pero deben aceptarla ahora, porque Mis castigos vendrán y afectarán a los que no han escuchado Mi Palabra.

Que así sea.

Su Padre que está en el Cielo.

Creador de todos los hijos de Dios y Gobernante sobre todo lo que es. Amén.

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“Crean y confíen, es la palabra del Todopoderoso. Yo, el Ángel del Señor, se lo digo. Amén.”

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“Sólo su conversión los salvará del castigo y de la desgracia. Crean y confíen y conviértanse a Jesús, de lo contrario estarán perdidos. Amén. Un ángel del Señor de los 7 coros.”

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Se me muestra lo siguiente:

Las huestes celestiales están a la espera. Parece que Jesús y la Madre de Dios todavía están conteniendo la ira del Padre.

“Así es.

Amén.”