1449. El amor del Padre — 30.08.2024
Dios Padre: Escribe Mi hija, escribe Mi niña, por Mí, por los hijos de la tierra, porque las cosas no van bien para ellos, para ustedes, para sus acontecimientos mundiales.
Juan: Y sólo su conversión los salvará del gran sufrimiento, de la gran miseria y de las indecibles injusticias que ahora se desatarán.
Dios Padre: Mi hija. Diles a los hijos que los amo. Mi amor por ellos es infinito y es misericordioso, pero lo que está sucediendo en ese momento en su tierra, en su mundo no es comparable a nada que haya sucedido antes.
NUNCA JAMÁS pongan a prueba Mi bondad, Mi paciencia y Mi amor misericordioso, pues quien quiera encontrarse conmigo, ¡que lo haga por amor!
Sólo él que ha entrado en un pacto con el diablo, (¡) consciente o inconscientemente (!), pone a prueba Mi paciencia, Mi bondad y Mi amor, pero, amados hijos y es eso lo que son, esto nunca sucederá, porque:
Yo, su Padre en el Cielo ¡soy un Padre amoroso y Mi amor por ustedes es infinito! Sin embargo, la misericordia dará paso a la justicia, y dichoso es él que Me encuentra por amor, dichoso es él que ama a Mi Hijo.
Mi hija. Diles a los hijos que Mi amor es infinito. No importa lo que hagan, ¡Mi amor por ustedes siempre está ahí!
Muchos de ustedes no lo saben, pero a través del arrepentimiento y la penitencia, a través de la expiación y el sacrificio pueden liberarse del pecado y recurrir a Mi infinito amor por ustedes.
Ustedes son Mis hijos y como tales los amo como un padre. Les envié a Mi Hijo Jesucristo para que resucitarán y vivirán conmigo en el Reino de los Cielos. Pero muchos de ustedes prefieren la vida mundana a la vida eterna en la gloria.
¡Hijos, hijos! ¡Que se les diga que nunca se sentirán plenos por cosas mundanas! Su sed de tener cada vez más y más hace que muchos de ustedes apostatan. Ni se sentirán plenos en la vida mundana ni alcanzarán la vida eterna a menos que se conviertan.
Así que recurran a Mi amor misericordioso y abran su corazón a Mí, a Jesús. Sólo ÉL les abrirá las puertas del Nuevo Reino, sólo a través de ÉL alcanzarán la gloria en el Reino de los Cielos.
Su Padre en el Cielo con Juan.
Juan: Mis hijos. El Padre está preocupado por ustedes, por su salvación. Ustedes como sociedad están muy alejados de Él, de Jesús y sólo unos pocos hijos están preparados para los días venideros. Todo lo que les ha sido revelado se está cumpliendo. Están viviendo en el final de los tiempos, ¿por qué no lo ven?
Aléjense del mundo, que ha sido provisto por el diablo con las cosas más seductoras, y ¡vuélvanse a Jesús! ¡¿Qué es una vida mundana comparada con la vida eterna?!
María Magdalena: Sean sabios y no insensatos, porque el insensato no verá abiertas las puertas del Nuevo Reino. Pero el sabio está preparado para el Señor y su regreso, y ese día está cerca, muy cerca.
Un Ángel del Señor: Mis hijos. Jesús volverá, así que prepárense, porque sólo él que esté listo para ÉL irá con ÉL, pero todos los demás se perderán, porque no estaban preparados para el Señor.
Así que escuchen la palabra que está escrita aquí, porque es el Padre quien no quiere ver a ninguno de Sus hijos perderse.
Estén preparados.
Yo, un Ángel del Señor, se lo digo hoy con María Magdalena y Juan, porque el tiempo ha avanzado y el Padre está preocupado por Sus hijos, por ustedes. Amén.