68. Presenten todo ante Dios Padre y al confesionario — 22.03.2013
Mi hija. Mi querida hija. Los corazones de muchas personas se enfriaron. Especialmente tú, hija Mía, lo estás sintiendo. No estés triste y ora para que también estos corazones encuentren a Mi Hijo, porque solo así, a través de las oraciones de todos ustedes, Mi Hijo y Yo podemos alcanzar tantas almas.
Nadie goza ser malo. Nunca olviden que el diablo y sus demonios están haciendo trampas a todos Nuestros hijos. En las situaciones más pequeñas él está ahí y los ataca. Si permanecen en el amor, el adversario no tiene chance de hacerlo, pero es justo eso lo que se les hace tan difícil. Sin embargo, inténtenlo una y otra vez y presenten todo en donde faltaba (no estuvo presente) el amor ante Dios Padre y al confesionario, para que sus corazones estén libres y sus almas limpias nuevamente.
Mi hija, hay muchas pruebas pequeñas y grandes en este camino hacia Dios, pero quien lo camina con amor será recompensado abundantemente. (La Madre de Dios está sonriendo)
Tu / su Madre en el Cielo.