367. ¡En esta Navidad, entréguense por completo a Mi Hijo! — 06.12.2013
Mi hija. Mi querida hija. Qué lindo que hayas venido. Nos alegramos mucho.
Esta iglesia tiene un lugar en tu corazón, porque aquí has sido «formada», es decir, preparada para todo lo que estás viviendo hoy.
Mi hija. Diles a Nuestros hijos que encuentren el camino de vuelta a Nosotros, que asistan a Nuestras Santas Misas y que dejen que la paz entre en sus corazones, porque si siguen corriendo tras los placeres y las cosas terrenales, entonces se perderán, ya que nunca estará en ellos la paz del Señor, y donde el corazón no siente la paz allí hay intranquilidad, hay sufrimiento, allí se generan odio y envidia y entonces surgirá la discordia y habrá mucho descontento en ustedes y a su alrededor y de la paz del Señor se alejarán cada vez más.
Mis hijos. Vengan todos a Nosotros y celebren esta Navidad con Nosotros en contemplación y en honor al Señor. Entonces la paz puede entrar en sus corazones, el amor puede reavivarse y pueden encontrar el camino de vuelta al Padre.
Prepárense para Mi Santo Hijo, porque pronto ya volverá y mostrará el camino correcto. Pero sólo el que se ha preparado para ÉL podrá recibirlo con alegría, sólo el que Lo ama podrá enfrentarse a ÉL, porque Su amor es tan extraordinariamente grande que no podrán soportarlo en caso de que no se hayan preparado, y como ésta será la última etapa del viaje en su tierra, es tan extraordinariamente importante que se conviertan ahora.
Sólo el que acepte a Mi Hijo, Le de su SÍ y viva de acuerdo con Sus enseñanzas y los mandamientos del Padre, entrará en el Nuevo Tiempo glorioso y estará unido al Padre eternamente.
Mis hijos. En esta Navidad, entréguense por completo a Mi Hijo y dejen que Sus milagros entren en sus vidas, porque ÉL que los ama tanto los está esperando, Mis hijos tan amados.
Vengan, Mis hijos, vengan, porque aún no es demasiado tarde. Que así sea. Amén.
Su Madre en el Cielo Quien los ama.
Madre de todos los hijos de Dios.
Amén, les digo esto:
Emprendan el camino hacia Mí y dejen el pasado en el olvido. Confíen en Mí y empiecen a darme su amor, porque quien Me ama se llenará cada vez más de Mi amor misericordioso.
Vengan a Mí, Mis hijos, y déjense caer en Mis brazos. Yo, su Jesús, los estoy esperando. Amén.
Su Jesús Quien los ama.
Redentor de todos los hijos de Dios.