436. ¡…están causando tanta miseria con ello! — 07.02.2014
Mi hija. Mi querida hija. Ahí estás. Gracias, Mi hija. Yo, tu Madre en el Cielo quien te ama, y Mi Santo Hijo deseamos decirles a ustedes, a ti y a todos Nuestros hijos, hoy lo siguiente:
Los amamos mucho, Mis hijos tan amados, sin embargo, les queda poco tiempo para salvarse a sí mismos y a su alma, porque el tiempo del fin se acerca y si los acontecimientos continúan can esta velocidad, si la maldad en su mundo aumenta tan furiosamente, entonces Dios Padre intervendrá y castigará a los que causan tanto sufrimiento. ÉL bajará su mano castigadora sobre aquellos que se niegan a dar su SÍ a Jesús y permitirá que los peores desastres sucedan donde el pecado es rampante.
Mis hijos. ¡Deben frenar su fornicación! Su estar extraviado [su libertinaje] los está llevando a las manos del diablo y están causando tanta miseria con ello. ¡Dejen el pecado! ¡No sigan ensuciándose más! ¡Y empiecen a sentir arrepentimiento! ¡Sólo mediante el arrepentimiento podrán limpiarse del pecado! El que no se arrepienta, para él no habrá esperanza de Vida Eterna al lado del Señor.
Mis hijos. ¡Jesús está a la espera para ustedes! ¡Está con ustedes! ¡Acepten Su ayuda, porque ÉL es el ÚNICO que pueda lavar y salvar su alma y a ustedes! A través de ÉL encuentran al Padre y ¡reconocen el camino correcto! ÉL está a su lado en TODOS los asuntos de su existencia, y con ÉL alcanzarán el Reino.
Mis hijos. ¡Deben prepararse ahora! ¡No dejen pasar esta oportunidad así no más! Su Padre Celestial los ama tanto, y por este amor les da toda esta ayuda, ¡pero deben aceptarla! ¡Deben ponerla en práctica! ¡Deben vivirla! ¡Estos mensajes son para su salvación! ¡Léanlos! ¡absórbanlos [acéptenlos]! ¡Y vívanlos! Así llevarán el Sello del Señor y se salvarán de plagas y calamidades.
Los amo, Mi querido rebaño de niños, tal como los ama Mi Hijo, con todo Su corazón. Por ustedes EL dio Su vida, por ustedes sufrió y sigue sufriendo. Muchos hijos de la expiación sufren con ÉL POR USTEDES, hijos Míos, para que encuentren el camino correcto y den su SÍ a Jesús. ¡No los hagan soportar más este sufrimiento y conviértanse! ¡Ésta es su única oportunidad de escapar del diablo y del lago de fuego que se abrirá en el día de la decisión!
¡Conviértanse y encuentren a Mi hijo! Los amo,
su Madre en el Cielo y Jesús que tanto los ama.
«Mis hijos. Mis tan amados hijos. Los estoy esperando porque los amo. YO SOY el camino. YO SOY la luz, Mi amor se lo regalo y Mi paz se la doy, pero deben darme su SI para que Yo pueda trabajar en ustedes.
Siempre respetaré su libre albedrío, por lo tanto, vengan a Mí por su propia voluntad y grande será Mi alegría.
Los amo.
Su Jesús.
Amén.»
Mi hija. Divulga esto. Gracias.
(La Madre de Dios y Jesús están de la mano y llenos de amor por nosotros).