1454. ¡Les han mentido! 11.10.2024
Madre de Dios: Mi hija. Yo, tu Madre en el Cielo, estoy preocupada por ustedes. Los hijos no guardan Nuestra Palabra. Viven como si todo siguiera para siempre, como si sólo existiera la vida terrenal, como si su mundo estuviera en “buenas manos” y no estuviera entretejido por las manos del diablo, sin embargo, el estado de su mundo está empeorando, se está volviendo más amenazador para todos los hijos de la tierra, pero muy pocos de ustedes están dispuestos a convertirse y regalar y confiar su Sí y su vida a Jesús.
Hijos, hijos, estén advertidos, porque el fin CAERÁ sobre ustedes, y no lo habrán esperado.
Todo sucederá tan rápidamente que ustedes simplemente serán “atropellados”.
Su voluntad y su entrega a Mi Hijo, Jesucristo, será puesto a prueba de manera especial en estos días.
Sólo los hijos fieles están siendo protegidos.
Días temerosos caerán sobre el que permanezca apegado al mundo, a las cosas terrenales.
¡Destrucciones de todo tipo caerán sobre (¡)TODAS LAS PARTES DE SU TIERRA(!), ¡incluso donde nunca lo esperarían!
Yo, su Madre en el Cielo, estoy preocupada por ustedes.
Deben convertirse y preparar su alma, porque su alma es inmortal amados hijos, y es eso lo que son, y lo importante es salvarla a ella [al alma], ¡no su prosperidad y bienestar terrenales!
Dios Padre: ¡No permanezcan en la incredulidad ni en la aberración [la mala fe], hijos Míos, pues sólo Jesucristo es el camino hacia Mí y hacia el Reino de los Cielos!
¡No caigan en las mentiras de los que les predican otra cosa!
¡Quien no encuentre a Jesús, Mi Hijo hecho carne por ustedes, no entrará en el Reino de los Cielos y no volverá a Mí, a su Padre, Dios Quien Soy, Creador de todos ustedes y Padre en los Cielos!
¡Les han mentido y (¡)les siguen mintiendo aquellos que no están Conmigo(!) amados hijos, y es eso lo que son, y los llevan por mal camino y los conducen a aquel de quien ellos están cerca!
Jesús: Estén advertidos y no escuchen sus mentiras, porque sólo Yo Soy el Camino y la Verdad, sólo Yo, Jesucristo, los conduzco de vuelta al Padre.
Dios Padre: ¡Así que encuentren el camino hacia Jesús, Mi Hijo que tanto los ama y que murió por ustedes en la cruz, porque sólo ÉL es el camino a casa, ¡sólo ÉL!
Un ángel del Señor: Así que escuchen lo que dicen el Padre, Jesús y la Madre, porque ellos están preocupados por ustedes, por su salvación.
Dios Padre: ¡A nadie, repito: a nadie queremos ver perdido, ¡pero muchos de ustedes están cayendo directamente al abismo!
Jesús: El que no se convierta, no podré hacer nada por él y su alma perecerá.
Nuestra Señora: escuchen lo que dice Mi Hijo y conviértanse amados hijos, y es eso lo que son.
Los amo mucho.
Su voluntad y entrega a Mi Hijo están siendo puestas a prueba.
Un ángel del Señor: Así que estén preparados, amados hijos, estén preparados, porque el que no lo esté se perderá. Amén.
Madre de Dios: Sólo su conversión los salvará de la decadencia y de la caída, ¡sólo su conversión!
Sólo Mi Hijo, su Jesús, les dará entrada en el Nuevo Reino y en el Reino de los Cielos del Padre, ¡sólo Mi Hijo, su Jesús!
Dios Padre: A quien no esté con ÉL, a quien sea infiel, tibio o se extravíe, no se le concederá la entrada. Las puertas permanecerán cerradas para él y su caída en el infierno estará sellada.
Madre de Dios: Así que escuchen al Padre y encuentren a Jesús. Yo, su Madre en el Cielo, estoy muy preocupada por ustedes, pues el tiempo está avanzado, pero sólo unos pocos se están preparando. Amén.
Su Madre en el Cielo, con Jesús, el Padre y un ángel del Señor, con grandes poderosos ángeles y arcángeles con espadas y lanzas y armaduras de batalla presentes para protegerlos. Amén.