535. ¡Este es Mi gran regalo a los hijos de la tierra en estos días antes del fin! — 25.04.2014

Mi hija. Mi querida hija. Siéntate conmigo y escribe. Escucha lo que Yo, tu Padre que tanto te ama, quiero decir hoy a Mis hijos de la tierra:

Mis hijos. Mis hijos tan amados por Mí. Deben empezar a creer en Mi Hijo, Jesucristo. ¡Deben aprender a confiar en ÉL en todos los asuntos de su vida! No les queda mucho tiempo porque Mi adversario está realizando sus planes a una velocidad vertiginosa y ¡sólo Mi Hijo, su Jesús, puede salvarlos de los males del diablo!

Mis hijos. ¡Honren a Mi Hijo, vengan a ÉL y déjense caer completamente en ÉL! ¡Entréguense a ÉL! ¡Conságrense a ÉL! Cuanto más cerca estén de ÉL, menos podrá hacer el diablo contra ustedes: ustedes entonces «pertenecen» a Jesús, ¡y el diablo debe ceder!

Mis hijos. Mis hijos, tan amados por Mí. El tiempo apremia y solo Mi Hijo «conoce» el camino hacia Mí. No podrán recorrerlo (el camino hacia Mí) solos, así que denle a ÉL, su Salvador, su SÍ y acepten Mis gracias celestiales que concedo especialmente a los hijos de entre ustedes que vienen a Mi Hijo con un corazón honesto.

Pero también concedo Mis gracias a los hijos que se han extraviado, porque Yo, su Padre Todopoderoso, escucho sus oraciones y ahora también toco a los pecadores más descarriados de entre ustedes ¡para que no digan al final de los días que no Me conocieron, que no supieron de Mí! Así que ellos también tienen la oportunidad de volver a Mi Hijo y de convertirse, y con brazos amorosos recibiré a cada hijo que sinceramente se vuelva a Mí, a Mi Hijo, se arrepienta de sus pecados y se entregue completamente a Mí.

Este es Mi gran regalo a los hijos de la tierra en estos días antes del fin para que ninguno tanga que perecer, porque YO SOY un Padre amoroso, Mi amor es misericordioso y por eso perdono al mayor pecador si se convierte, se vuelve a Jesús y a Mí y se arrepiente sinceramente de su pecado.

Mis hijos. Lleven esta «buena nueva» a todos los hijos de la tierra, porque el fin está cerca y sólo queda poco tiempo: Abrazaré al pecador más empedernido en Mis Santos Brazos cuando venga a Mí arrepentido. ¡Mis gracias fluyen ahora sobre toda la tierra y tocan todos los corazones! Así que nadie diga que no sabía de Mí, porque el amor con el que ahora toco los corazones de todos los hijos no es de este mundo.

¡Los amo y anhelo su conversión! Quien se convierta y corra hacia Mi Hijo, Yo también lo sostendré en Mis brazos, porque Jesús lo traerá a Mí y la alegría en Mi Corazón Paternal que tanto los ama será grande. Amén.

Su Padre en el Cielo.

Dios Todopoderoso. Creador de todos los hijos de Dios. Amén.

«El Señor ha hablado, así que acepten Su regalo. Yo, el Ángel del Señor, se lo digo. Amén.

Su Ángel del Señor.»

«Mi Padre los ama. ¡Este regalo es su salvación de la perdición! Acéptenlo y vengan a Mí. No rechazaré a nadie que venga a Mí. Pero el que también rechace este don precioso perecerá ciertamente, porque el diablo no lo soltará, y ningún grito, ninguna súplica, nada podrá entonces salvarlo. ¡Sólo su conversión los salvará!

Su Jesús, que los espera con anhelo y amor. Amén.»

Divulga esto, Mi hija. (Dios Padre y Jesús.)

534. ¡Es la humildad la que les abrirá la puerta del Reino del Cielo! — 24.04.2014

Mi hija. Di hoy a Nuestros hijos que Nosotros los amamos.

Es por Nuestro amor que les damos estos mensajes. Acéptenlos con un corazón humilde y regocíjense, porque ustedes son tan importantes para Dios, Nuestro Padre, que ÉL Nos ha confiado a Nosotros, Sus Ayudantes Celestiales, esta misión para permitirles alcanzar la Vida Eterna a Su lado y salvaguardarlos de la angustia y el tormento.

Mis hijos. Mis tan amados hijos. ¡Conviértanse y den su SÍ a Jesús! ¡De esta manera la profecía también se cumplirá para ustedes y su alma no perecerá! Vengan a Jesús, su Salvador que tanto los ama, y entren con ÉL en la gloria del Padre, ¡que les dará la mayor paz, alegría, felicidad y amor!

Se sentirán plenos y ningún mal los sobrevendrá (nuca más), porque (entonces) vivirán como verdaderos hijos de Dios a Su lado, y donde el Padre está en casa y reina no hay mal, sino que hay un amor indescriptible y para ustedes (todavía) incomprensible con el que serán dotados y colmados.

Mi hija.

Diles a Nuestros hijos que lleven la humildad en sus corazones, porque son las almas humildes las que Mi Hijo ama tanto, y es la humildad la que les abrirá la puerta del Reino del Cielo.

Mis hijos. ¡Tengan un corazón puro y humilde! Estén completamente con Mi Hijo y dejen que EL cuide de ustedes. El mundo en el que viven es duro, corrupto y impuro, pero pronto pasará. Entonces habrá amor y pureza y paz y sus corazones serán grandes y plenos y -como su alma- ¡se regocijarán con alegría y plenitud!

Honrarán a Dios, su Padre y Creador, LE alabarán y glorificarán y LE darán las gracias. Serán tan felices que no puede imaginárselo ahora.

Así que vengan a los Santos Brazos de Mi Hijo, su Jesús, y comiencen a andar el camino hacia la gloria del Padre. Amén.

Los amo.

Con profunda e íntimo afecto.

Su Madre en el Cielo quien los ama.

Madre de todos los hijos de Dios y Madre de la Salvación. Amén.

Divulga esto, Mi hija.
(Jesús sonríe amorosamente.)

533. ¡Por eso es tan importante que vuelvan a Mi Hijo! — 23.04.2014

Mi hija. Mi querida hija. Gracias. (La Virgen sonríe amorosamente.) Por favor, dile a Nuestros hijos lo siguiente:

El amor del Padre es infinitamente grande y Su anhelo por ustedes está lleno de amor y preocupación, pues Su adversario está al acecho para apartarlos del camino hacia el Padre y llevarlos por los caminos de la perdición.

Mis hijos. ¡Por eso es tan importante que vuelvan a Mi Hijo! ¡Jesús los guiará y los llevará siempre por el buen camino! ÉL -si LE dan a ÉL su SÍ- está con ustedes, ahí para ustedes y ¡LOS SALVARÁ DE LA CONFUSIÓN Y DE LA CAIDA! Pero deben entregarse completamente a ÉL, vivir con ÉL, dejar que ÉL viva a través de ustedes, ¡para que escapen de las trampas tendidas por el diablo y no se conviertan en sus esclavos!

Mis hijos. Vuelvan a Mi Hijo, su Jesús, ¡y su alma se salvará! ¡Ustedes no perecerán y experimentarán la gloria del Padre!

Vengan a ÉL, a Jesús, su Salvador, ¡y déjense caer completamente en Sus brazos y cuidado!

¡Jesús cuida de ustedes! ¡ÉL los ama! ¡ÉL los guía y ÉL los lleva al Padre! Amén.

Con profundo amor y afecto,

Su Madre en el Cielo quien los ama. Amén.

«Quien venga a Mí vivirá como un verdadero hijo del Señor, y su corazón y su alma se regocijarán de alegría.

Así que vengan a Mí, Mis amados hijos, y conviértanse en uno conmigo.

YO SOY el camino, la luz, su Salvador y llevaré al Padre a todo aquel que Me dé su SÍ.

¿Qué están esperando, Mis amados hijos?

¡Los amo desde lo más profundo de Mi Corazón Redentor y los estoy esperando! Su Jesús, que tanto los ama. Amén.»

Mi hija. Divulga esto. Amén.

532. ¡Celebren esta fiesta como Jesús, Mi Hijo, lo desea! — 22.04.2014

Mi hija. Mi querida hija. Qué bueno que hayas llegado. Gracias. Te amo y estoy siempre contigo, hijita Mía.

Escribe, Mi hija, y diles hoy a Nuestros hijos que llevamos alegría en Nuestros corazones por las oraciones que Nos están regalando y por la celebración de la Pascua que muchos de ustedes han celebrado con profunda devoción, compasión y aceptación del sufrimiento, con amor y entrega a Mi Hijo, su Jesús.

Mis hijos. Sus «sacrificios» son grandes en este tiempo y por ello les damos las gracias, especialmente también el sacrificio cuaresmal que han asumido por amor a Mi Hijo. Gracias, Mis tan amados hijos. Pueden estar seguros de que el tiempo de gracia continuará hasta el próximo domingo (Domingo de la Misericordia) inclusive.

Las gracias del Cielo son grandes, el amor del Padre y del Hijo es infinito y la misericordia es un regalo especial para los hijos de la tierra para que puedan encontrar su camino de vuelta al Padre y no se pierdan en el pecado y el sufrimiento.

Mis hijos. Celebren esta fiesta como Jesús, Mi Hijo, lo desea y continúen rezando en Sus intenciones, las que ÉL dio a Santa Sor Faustina y las que hoy son tan indispensables para su tiempo actual.

Mis hijos. Ofrézcanlo todo como ofrenda a Mi Hijo, su Jesús, porque ÉL lo transformará en amor para el mundo. Este es un tema grande, Mis hijos, pero sepan que todo sacrificio hace bien. ¡Así que ofrézcalo todo como ofrenda y compartan (también) su alegría con el Señor! Amén.

Su Madre del Cielo que tanto los ama.

Madre de todos los hijos de Dios y Madre de la Salvación. Amén.

531. ¡Las mentiras de Satanás salen de la boca de aquellos que dicen ser verdaderos hijos del Señor…! — 21.04.2014

Mi hija. Mi querida hija. Gracias. Diles a Mis hijos hoy que oren.

La oración es necesaria, Mis hijos, ¡y es muy fuerte y poderosa en la lucha contra el mal! Ustedes detienen las atrocidades a través de su oración y ayudan a muchas almas y hijos a encontrar a Mi Hijo.

Mis hijos. ¡Oren en amor y devoción a Mi Hijo y permanezcan fieles a EL en estos tiempos! Las mentiras de Satanás son muchas y salen de la boca de aquellos que dicen ser verdaderos hijos del Señor, pero no lo son. ¡Ellos adoran a Satanás y destierran a Mi Hijo! Ellos hacen gran daño y los dañan a ustedes.

Miren atentamente lo que hacen y escuchen atentamente lo que dicen, porque sus obras y mentiras están disfrazadas y (todavía) son apenas perceptibles, porque se «pierden» en la bondad superficial, pero nada de lo que hacen estos adoradores de Satanás es bueno, sino que sirve sólo a un propósito: dar a Satanás el dominio del mundo, así como el control sobre ustedes y sobre su alma, la que ellos saben cómo capturar hábil y astutamente si ustedes no están verdadera y totalmente con Mi Hijo.

Mis hijos. ¡El decir “creo que ahí hay un Dios”, no es suficiente para ser admitido en el Reino de los Cielos! ¡Deben vivir con Jesús, de lo contrario las puertas permanecerán cerradas para ustedes! El tiempo de la decisión está inminente, y ¡ay de aquel que no venga a Jesús: se perderá para el diablo y pasará su eternidad en el tormento! ¡Pero los que vuelvan a Jesús entrarán en el tiempo glorioso de la paz y vivirán como hijos felices del Señor!

Mis hijos. Entréguense [auto regálense] a Mi Hijo, ¡porque ÉL es su Salvador! EL es el amor, la misericordia, la luz en su camino y EL da la paz. ¡Corran hacia ÉL y síganle a ÉL! Vivan con EL y no dejen que el diablo los ciegue. Ustedes se perderán en la ilusión y la niebla del diablo, y a quien se extravíe en sus trampas lo arrastrará con él (al abismo) y no lo devolverá.

Vengan, pues a Mi Hijo ¡y oren los unos por los otros! Así no se perderán, porque Mi Hijo vendrá a redimirlos y a llevarlos al glorioso tiempo de la paz. Amén. Así sea.

Su Madre en el Cielo que los ama.

Madre de todos los hijos de Dios y Madre de la Salvación. Amén.

Divulga esto, Mi hija. Amén.

530. ¡Lo que comenzó hace 2000 años se completará ahora! — 20.04.2014 — Domingo de Pascua

Mi hija. Mi querida hija. Qué bueno que hayas llegado. Yo, tu Santo Jesús, estoy aquí contigo. Te amo, hijita Mía, y continúo introduciéndote en Mis misterios y en los del Padre. Escribe ahora, Mi pequeña, y déjate caer completamente en Mis brazos:

¡Los hijos de la tierra deben despertar! Demasiado grande es su incredulidad, demasiado grande su aberración. Han perdido su camino y vagan sin rumbo, pero en el camino de sus vidas el diablo acecha en cada esquina, en cada «recodo del camino», en todas partes de cada sendero. Él pone piedras de tropiezo y obstáculos exactamente donde ustedes están recorriendo el camino hacia el Padre, y como no lo ven, como no reconocen lo astuto que es el diablo en lugar de afrontar los obstáculos los esquivan y toman el camino «más fácil», pero hijos, estén advertidos, porque éste no es el camino hacia el Padre, sino el camino hacia el mundo ilusorio del diablo que, una vez que se hayan hundido en la niebla, conduce a la oscuridad y al tormento del alma.

Mis hijos. Afronten lo que la vida les da, es decir, acepten su(s) cruz(cruces) y llévenla/s con alegría, ¡no importa lo pesada/s que sean! Acéptenla/s y ofrézcanmela/s como ofrenda, ¡entonces entréguenmela/s y Yo la/s llevaré por ustedes! YO SOY el Hijo del Todopoderoso, así que ¿no creen que pueda hacer esto? ¡Confíen en Mí! ¡Confíen en Mí con TODO! Yo CUIDO de ustedes, ¡pero deben confiar en Mí!

Mis hijos. Oren por todos aquellos que aún no Me han encontrado. Es la suplica de Mi Corazón, hoy, en el Día de Mi Resurrección, porque Yo morí la muerte en la Cruz por cada uno de ustedes y por eso deseo ardientemente y lleno de amor por ustedes su regreso al Padre, porque fue por esto que Yo morí por ustedes en la Cruz, y Mis Santas Llagas siguen curando sus heridas hasta el día de hoy y Mi Preciosa Sangre, derramada por todos los pecadores -también por ti que estás leyendo esto- sigue fluyendo sobre su tierra para su salvamento y su salvación, porque, Mis tan amados hijos, SU SALVACIÓN ESTÁ POR LLEGAR PRONTO, es decir, lo que comenzó hace 2000 años se completará ahora.

Su tierra será «transformada» y ustedes llegarán a ser (más) perfectos. Este será el Nuevo Reino que comenzará al final de este tiempo, el final del dominio de Satanás sobre ustedes, para los hijos que están Conmigo, que son fieles a Mí, y su «perfección» se producirá a través de la pureza que se da a todos los hijos fieles, y donde no haya más pecado porque no hay más maldad, no habrá más enfermedad y no más sufrimiento del alma. Serán sanos, verdaderos hijos de Dios y así vivirán 1000 años -esto no quiere decir que todos vivirán 1000 años ahora; aprenderán más sobre esto a su debido tiempo- y Yo, su Jesús, cuidaré de ustedes allí.

Mis hijos. Alégrense, porque este tiempo será hermoso. Será maravilloso y vivirán bendecidos con las glorias del Padre.

Mis hijos. Oren por todos sus hermanos y hermanas en el Señor y vivan en paz unos con otros. Oren por la paz en los corazones de todos ustedes y oren por la paz en sus países y en el mundo entero.

Yo, su Jesús crucificado y resucitado, se lo pido. Amén.

Divulga esto, Mi hija. Amén.

529. ¡Los planes del maligno son horribles y crueles para colocar a su anticristo! — Domingo de Pascua — 20.04.2014

Mi hija. Mi querida hija. Ven a Mí y escucha lo que Yo, tu Padre en el Cielo que tanto te ama, quiero decir hoy a los hijos de la tierra:

Mi amor por ustedes es grande. Mi anhelo por ustedes es infinito. Los amo tanto, Mis hijos tan amados por Mí, y quisiera abrazarlos a cada uno de ustedes en Mis Brazos Santos Paternales, sin embargo, tantos de ustedes se oponen a Mí, no Me aman, no Me honran. Pisotean Mis mandamientos, escupen sobre las enseñanzas de Mi Santo Hijo Jesús y no respetan la vida: ni la de ellos mismos, ni la de su prójimo, no respetan su mundo, Mi creación.

Mis hijos. Oren por los hijos apóstatas para que también ellos Me encuentren a Mí, Padre de todos ustedes. Mi Corazón Paternal sufre a causa de estos hijos y Mi dolor es grande. Así que oren, Mis hijos fieles, y pidan por la conversión de ellos. Les doy las gracias desde lo más profundo de Mi Corazón Paternal que tanto los ama.

Mis hijos. Mi alegría por ustedes, que celebran las fiestas de Mi Hijo en recuerdo a ÉL, con compasión y llenos de amor por ÉL, es grande. Ustedes alivian Mi dolor y son ustedes que están con Jesús, que confian, esperan y creen en ÉL, los que haccen posible que Yo derrame esta abundancia de gracias sobre su tierra y toque los corazones que no conocen Mi amor. Es la oración de todos ustedes la que lo hace posible, su fidelidad y su confianza en Mi Hijo.

Mis hijos. ¡Oren por la paz, por la paz en los corazones de todos Mis hijos -creyentes o apóstatas- y por la paz en su mundo! Esta es Mi gran súplica a todos ustedes para prevenir que sufran, porque los planes del maligno son horribles y crueles, y para colocar a su anticristo ha planeado el mayor sufrimiento y maldad y horror para los hijos del mundo.

Estén advertidos Mis amados hijos, porque el anticristo vendrá como un «portador de paz», ¡¡¡PERO NO LO ES!!! Miren cuidadosamente, ¡porque los movimientos de Mi adversario son astutos y él ha planeado y arreglado todo tan hábilmente que engañará a miles de millones de Mis hijos! Así que estén advertidos, ¡porque el tiempo está cerca!

Su oración, Mis queridos hijos, podrá prevenir muchas calamidades, ¡PERO DEBEN APROVECHARLA y usarla para el bien!

Oren, oren, oren, de lo contrario el mal ensombrecerá su mundo de la manera más terrible y la oscuridad se colará en sus corazones.

Oren, ¡SÓLO la oración puede ayudarlos, Mis hijos!

¡Su oración es poderosa!

Amén.

Su Padre en el Cielo, que tanto los ama.

Creador de todos los hijos de Dios y Creador de todo ser. Amén.

«Mi hija. Divulga esto. Amén». La Madre de Dios.

«El Señor ha hablado, así que sigan Su llamada. Aprovechen la oración como arma contra el mal e invoquen a los Santos Ángeles para que los protejan.

Yo, el Ángel del Señor, se lo digo. Amén.

Su Ángel del Señor.»

«Mi hija. Gracias. Tu Jesús (sonriendo amorosamente).«

528. Estos días son tan preciosos, ¡celebradlos como tales! — 19.04.2014 — Sábado Santo

Mi hija. Mi querida hija. ¡Estos días son tan preciosos! Celébrenlos como tales, como días muy preciosos, y denle a Mi Hijo el honor que LE corresponde como su Salvador que tanto los ama. Serán ricamente recompensados en el Reino del Cielos del Señor, ¡que sólo conocerán aquellos de ustedes que vivan con Jesús!

Quienquiera que LO rechace, LE dé “la espalda” y no LO acepte como QUIEN ES, las puertas del Cielo permanecerán cerradas para él y no podrá ir con Jesús tan pronto como ÉL venga a llevarlos con Él.

Mis Hijos. ¡No sean tontos! Den su SÍ a Jesús y no pongan en peligro su eternidad. Yo, su Madre en el Cielo, se lo pido, porque los amo y quiero que todos ustedes estén a salvo y con el Padre. Que así sea.

Su Madre en el Cielo que los ama.

Madre de todos los hijos de Dios y Madre de la Salvación. Amén.

Mi Hija. Divulga esto. Amén.

527. ¡Mi Preciosa Sangre los limpia! — 19.04.2014 — Sábado Santo — 15.00 horas

A través de Mi Preciosa Sangre, que fluye de Mis heridas, Yo limpio su tierra.

Mi Preciosa Sangre los limpia. Los sana y los conduce a Mí.

Récenme, porque Mi amor por ustedes es grande, tan grande que los redimiré a todos ustedes cuando llegue el momento de llevarlos a Mi Nuevo Reino.

Récenme, porque sólo él que está Conmigo, que confía en Mí podré llevar Conmigo. Amén.

Su Jesús, que tanto los ama.

«Mi hija. El amor que tiene Mi Hijo para ustedes es infinitamente grande y EL no quiere perder ni un hijo de ustedes.

Así que recen por sus hermanos y hermanas para que se cumpla Su deseo de redimir a todos los hijos de Dios. Amén.

Con profundo amor,

Su Madre en el Cielo Quien los ama. Amén.»

Vete ahora.

526. ¡Cuanto más oren, más gracias se derraman sobre su tierra! — 19.04.2014 — Sábado Santo

Mi hija. Mi querida hija. Escribe, Mi hija. Yo, tu Santo Padre en el Cielo, estoy contigo para decirles a Mis hijos lo siguiente:

Mi alegría es grande por el homenaje que están rendiendo a Mi Hijo. Yo concedo Mis favores de manera especial a aquellos que se entregan completamente a Mi Hijo. A través de ustedes se alivia el dolor en Mi Corazón Paternal, que tanto los ama, por los hijos apóstatas.

Los amo tanto y doy Mis gracias al mundo entero en estos días. Cuanto más oren, más gracias serán derramadas sobre su tierra, cuanto más rueguen por los que no Me honran y están totalmente entregados a Mi adversario, tanto más obraré también en los corazones de ellos.

Oren, Mis hijos, oren, porque aún vendrán malos tiempos hasta que entonces Mi Hijo venga a ustedes desde el Cielo y ponga fin a todo mal.

Los amo, Mis tan amados hijos. Si todos ustedes solo pudieran sentir Mi amor, no habría más guerras entre ustedes, no más discordia ni hambre, no avaricia y ninguna de las cosas que el maligno pone en su corazón y (lo) perfora.

¡Los amo! ¡Encuentren su camino de vuelta a Mí, a su Creador!

Con profundo amor,

Su Padre en el Cielo que tanto los ama. Amén.