315. ¡La oración iluminará los corazones y los moverá a la conversión! — 21.10.2013

Mi hija. Mi querida hija. Gracias por venir.

Mis hijos. Es importante que oren, porque sólo la oración cambiará y traerá el bien, iluminará los corazones y los moverá a la conversión, hará el bien en su mundo, el bien en ustedes mismos, y detendrá y purificará gran parte de las malas acciones y vilezas, porque la oración, íntimamente dicha, es poderosa. Es poderosa y llena de milagros, porque cuando oren con un corazón sincero, entonces Dios, Nuestro Señor, hace que sus milagros sucedan.

Por lo tanto, Mis hijos, oren mucho y oren íntimamente [fervientemente], y oren siempre en las intenciones de Mi Santo Hijo, porque ÉL sabe dónde se necesita la oración, su oración, ÉL sabe cómo y dónde puede usarla amorosamente, y ÉL la lleva exactamente a donde más se necesita.

Mis hijos. Oren, por supuesto, también en sus propias intenciones y en las que son importante para ustedes, porque todas las oraciones serán escuchadas y respondidas si están en armonía con la providencia del Padre en el Cielo.

Mis hijos. Los amo mucho. Por favor, aguanten un poco más, porque ya pronto Mi Hijo vendrá a ustedes, así como Nosotros les hemos revelado. Pueden estar seguros de Nuestro amor celestial y de Nuestra protección que concedemos a los que se confían sinceramente y con todo su corazón a Mi Hijo.

Gracias, Mis hijos. Los amo.
Su Madre en el Cielo. Madre de todos los hijos de Dios.

Mi hija. Divulga esto, porque su oración es muy importante. Gracias. Amén.

314. No sólo quieren dominarlos, sino que también quieren ser dueño de la vida y la muerte — 20.10.2013

Mi hija. Me alegro de que hayas venido. Yo, tu Santa Madre en el Cielo, deseo decirte a ti y a todos Nuestros hijos lo siguiente:

Las persecuciones en su mundo son muchas y los asesinatos de inocentes abundarán. Oren para que Dios Padre, Nuestro Señor y Creador, ponga fin rápidamente a estas atrocidades, porque grande es el número de estos crímenes, y se volverá más grande aún, porque los que dominan [gobiernan] su mundo no sólo quieren dominarlos, sino que también quieren ser dueño de la vida y la muerte, y esto no puede ser.

Por lo tanto, oren, Mis hijos, para que cesen estos asesinatos, y oren por la salvación de todos sus hermanos y hermanas, porque cada alma que se convierta comenzará a hacer el bien. Se mantendrá alejado del pecado y trabajará para el bien de todos los hijos de Dios. Es decir, cada alma que ha encontrado a Mi Hijo ya no hará daño a nadie, es por eso, Mis queridos hijos, ¡que la conversión es tan importante!

Nadie que «esté con Dios» dañará a su hermano, y nadie que haya dado su SÍ a Mi Hijo dará su vida al pecado, y nadie que haya encontrado el camino hacia Nosotros se dejará llevar por la bestia, no a tales vilezas, ni a otros vicios y abominaciones.

Por lo tanto, Mis hijos, oren por la conversión de todos los hijos de Dios que aún no han encontrado el camino hacia ÉL, el Padre Todopoderoso y Su Hijo. Así harán el bien a todos sus semejantes y ayudan a que la paz, el amor y el bien se extiendan en su tierra y a su alrededor.

Mis hijos. Es tan fácil vivir juntos con amor, y sin embargo ustedes son tentados y cegados, hasta el punto de ser contaminados por el diablo. Abran sus corazones al bien, al Señor, entonces la paz vendrá a ustedes y sentirán el amor del Señor.

Mis hijos. Mis tan amados hijos. Vuelvan a Dios, su Padre, y a Jesús, Su Hijo unigénito. Entonces estarán en el camino del amor eterno. Que así sea.

Los amo. Oren por los niños.

Su Madre en el Cielo.
Madre de todos los hijos de Dios y Teresa del Niño Jesús.

 

«Amén, les digo esto:

el que no reza por su hermano,

el que piensa que debe pensar sólo en sí mismo,

el que piensa que todo es permisible para lograr sus objetivos, ha tomado el camino equivocado.

Debe darse vuelta y hacer penitencia, admitir sus faltas y arrepentirse. Entonces debe presentarse ante el Padre, y debe pedirle a ÉL perdón.

El perdón Yo, su Santo Jesús, les doy en cada confesión. Por lo tanto, vengan y usen este sacramento. Los liberará de la carga del pecado y hará que su corazón y su alma se alivien.

Yo, su Jesús, siempre estoy ahí para ustedes. Por lo tanto, pídanme que esté con ustedes, que les ayude y que les guíe y consúltenme a Mí y a Mi Espíritu Santo antes de que toman decisiones. Nunca dejen llevarse por las prisas, sino que consideren y escuchen a su corazón. Confíennos todo a Nosotros y les ayudaremos. Que así sea.

Su Jesús Quien los ama.
Redentor de todos los hijos de Dios. Amén.»

 

«Mi hija. Mi hijo los está esperando. EL quiere llevarlos a Mí cada uno de ustedes y dio su vida por este propósito. Su amor por ustedes es inconmensurable, así como Su Misericordia. Así que denle su SÍ a ÉL y déjense salvar por su hermano y Redentor Jesucristo.

Los amo a cada uno de ustedes con todo Mi Divino Amor Paternal.

Su Padre en el Cielo Quien tanto los ama.
Creador de todos los hijos de Dios y Creador de todo ser. Amén.»

 

«El Señor ha hablado, así que sigan su palabra. Yo, el Ángel del Señor, se lo digo. Amén. Un Ángel del Señor».

Gracias, Mi hija. (Jesús y Dios Padre sonríen con amorosamente)

313. «Mis hijos están muriendo. Oren por ellos. Por todos, en todo el mundo.» — 18.10.2013

(Santa Teresa del Niño Jesús sostiene en sus brazos a un bebé (casi) sin vida).

Mi hija. Mi querida hija. Hay persecuciones en todo el mundo, pero el mundo no informa nada al respecto. En África están «experimentando» con los más pobres, y especialmente a los más pequeños causan sufrimiento, como por supuesto a sus madres y padres, pero son los más pequeños que son vacunados y así destruidos, porque lo que reciben es para reducir a la humanidad.

Mis hijos. Superficialmente, “ellos” demuestran todo en una luz hermosa, pero la verdad es cruel. Los que les ayudan no lo ven, creen que están haciendo bien a los pequeños, pero desafortunadamente no es así. El mundo de ustedes está dominado por las logias del maligno, del horror, y sus miembros se encuentran en todas partes. En las posiciones más altas ellos tiran los hilos, deciden, tapan [lo que hacen] y manipulan al mundo, a las masas a su antojo, y Nuestros hijos les creen y siguen ciegamente.

Mis hijos. Mis amados hijos. ¡Deben despertarse y ver el fondo! Deben reconocer la cordada y saber que solo les dejan escuchar y ver lo que el maligno quiere que escuchen y vean.

No se trata de su bienestar, no importa cómo se comporten y decidan. Él, la raíz del mal, quiere dominarlos a todos y tiene éxito con ello, porque tantos de ustedes creen en sus promesas vacías, tantos se venden a sí mismos, su alma por dinero y gloria y no ven qué fin tomarán.

Ustedes pecan contra los inocentes. Los exterminan, los usan y los patean. Así no es como funciona. Su castigo será justo, sin embargo, la misericordia del Padre es tan grande que ÉL también a ustedes les da la oportunidad de arrepentirse. SU amor es Todopoderoso y SU corazón está tan lleno de amor por cada uno de Sus hijos que ÉL mira más allá de sus defectos y solo ve lo bueno en ustedes. Esto no significa que Él aprecie y respalde los pecados que cometen, sino que ÉL ve lo bueno en ustedes, lo promueve y así les da la oportunidad de volver a encontrar el camino correcto, el camino hacia ÉL.

Mis hijos. El cielo está triste porque las persecuciones y los asesinatos son rampantes. Están asesinando de manera oficial, pero no tienen fuerza policial para este tipo de crimen.

Mis hijos. ¡Deténganse y dense vuelta! No bloqueen aún más su camino hacia la eternidad, porque cuando haya llegado el día y se tomó la decisión, entonces Satanás les mostrará su verdadero rostro, y nada les quedará de fama y poder, de dinero y propiedad.

Solo tendrán una existencia insoportable, en terror, sufrimiento y necesidad. Y todo lo que les hayan hecho a los inocentes, sufrirán millones de veces ustedes mismos, porque la eternidad es eterna, y la noción del tiempo que conocen no es nada en relación. Es decir, sufrirán sin cesar y su tormento será grande.

Mis hijos. Vengan todos a Jesús, porque solo ÉL todavía puede redimirlos. Quien no escuche Nuestro llamado, quien no lo siga, conocerá el sufrimiento del infierno y las glorias del Señor permanecerán cerradas para él por siempre.

Conviértanse, Mis hijos, y denle a Jesús su SÍ. Aún no es demasiado tarde para eso.

Vengan ahora, Mis hijos, porque Mi Hijo también los ama a ustedes. Amén.

Que así sea.

Su Madre en el Cielo quien los ama.
Madre de todos los hijos de Dios. Amén.

 

«Hija Mía. Mi flor. Ahora estás de vuelta. Oren por los más pequeños del mundo, porque están siendo utilizados como conejillos de Indias. Esa es la llamada de Teresa que se preocupa por todos los pequeños. Te amo. Amén. Tu San Bonaventura.»

Visión: Teresa me muestra los más pequeños en África, y luego me muestra los más pequeños en los hospitales en todo el mundo. «Sucede en todo el mundo. También en los hospitales blancos.«

311. ¡Esta última purificación de su alma es necesaria! — 18.10.2013

Mi hija. Sus días en la tierra pronto acabarán, y grande será el sufrimiento del alma, cuando aquellos que no han reconocido a Mi Hijo «despierten» y se den cuenta de cuán equivocados estaban y a qué «ilusión» estaban sometidos. El arrepentimiento se apoderará de sus corazones y la desesperación se extenderá dentro de ellos.

Oren por estas almas, porque necesitan sus oraciones para no hundirse en dudas. Por favor, guíenlos, cuando haya llegado el momento, a través de esta casi insoportable agonía del alma para ellos, porque es SOLAMENTE la agonía del arrepentimiento la que infligirá este sufrimiento en sus corazones y almas, ¡no la agonía del diablo que será eternamente infligida a aquellos que no logren esta purificación!

Esta última purificación de su alma es necesaria. Sin ella, no podrían entrar en el Nuevo Reino de Paz, el Paraíso que se concederá a todos los hijos de Dios que son puros de corazón y alma.

Mis hijos. Cuando este momento llegue ahora y incluso los últimos de ustedes «despierten» y reconozcan, ¡entonces usen esta oportunidad para hacerse merecedor de entrar en el Nuevo Mundo Glorioso!

No les den poder a sus dudas, sino dénselas al Padre y al Hijo, e invoquen al Espíritu Santo que ÉL los ilumine. Todo el Cielo está a su disposición, pero deben completar esta purificación para no perderse al diablo.

¡Empiecen a orar para que sepan cómo se hace! Aquellos de ustedes que ignoran Nuestra Palabra sólo tendrán esta única oportunidad más antes de que Mi Hijo entonces venga a ustedes por segunda vez para derrotar al mal, la Bestia.

Su futuro lo deciden ustedes. No se inflijan más sufrimiento y reconozcan a su Jesús, porque ÉL vendrá a salvar a todas las almas fieles.

Que así sea.

Estén advertidos y estén preparados y oren por todos los que aún no han encontrado a Mi Hijo.

Los amo,

Su Madre en el Cielo.
Madre de todos los hijos de Dios.

310. ¡El diablo tiembla tan pronto como ustedes nos llaman y piden protección! — 17.10.2013

Mi hija. Mi querida hija. Yo, tu Madre del Cielo, he sido profanada, pero el mundo no lo ve.

¿Mis queridos hijos, no tienen, pues, el coraje de verlo? ¿O saben tan poco de Mí que por eso no se dan cuenta?

Mis hijos. Mi profanación comenzó cuando se lo hice saber. Mi profanación ahora también ha tenido lugar públicamente y está siendo continuado. Mis objetos sagrados han sido intercambiados y Me los han quitado, Mi rostro “se” profana con símbolos feos que (aún) no son visibles a simple vista.

Pero, Mis queridos hijos, ¡miren detenidamente! ¡Porque en Mis lugares Santos ya se están «enfureciendo»! «Sus” símbolos, los símbolos de la bestia, en todo el mundo se encuentran en las iglesias y en los objetos sagrados. ¡Y se volverá cada vez más fuerte! ¡Se volverá cada vez más pagano, y peor aún que eso se volverá cada vez más satánico!

Mis hijos. Yo, su amada Madre en el Cielo, he sido profanada por los adoradores de Satanás, pero crean y confíen, ¡porque seré Yo quien aplastará su cabeza (la de la bestia)!

Nada podrá jamás hacerme para disminuir Mi poder, Mi posición sobre él, porque es Dios Padre Quien me ha proporcionado esta gracia, y es ÉL, nuestro Padre Todopoderoso, Quien Me ha encargado con esta misión, la preparación de los corazones, para justo este tiempo tan difícil, el final de los tiempos.

La cabeza de la serpiente será aplastada y la victoria de Mi Hijo sobre la bestia vendrá. El Arcángel Miguel está listo con su ejército, y el diablo no tema a nadie tanto como a ÉL. Nuestro poder es grande, porque el Padre nos lo dio, y el diablo tiembla tan pronto como ustedes nos llaman y piden protección. Por eso intenta todo para apartarnos de la vida de ustedes, para profanarme, desfigurarme, deshonrarme a Mí, su Madre Santísima, incluso tratará de desconsagrarme, ¡sin embargo, el poder del Padre es mayor!

La oración al Santo Arcángel Miguel*, que deliberadamente fue retirada de sus Santas Misas, ahora deben volver a rezar con mayor intensidad, ya que ÉL pone a Lucifer en su lugar y saldrá con la espada levantada en la batalla contra el maligno.

Mis hijos. Crean y confíen y vean el mal que ya se Me ha hecho a Mí, su Madre en el Cielo. Los amo. Por favor, continúen rezando por Mi Santo Rostro y en las intenciones de Mi Hijo, y así ofrézcannos también sus visitas a la Misa.

Gracias, Mis hijos. Los amo mucho.

Su Madre en el Cielo.
Madre de todos los hijos de Dios.

«Escuchen lo que les dice María, porque deben mirar y estar atentos. Yo, un ángel del Señor, se lo digo. Amén.»

«Oren, Mis hijos. Sólo la oración los salvará de lo peor. Su Jesús con José y la comunidad de los santos. Amén.»

«Que así sea, hija Mía. Te amo. Tu Padre en el Cielo. Amén.»

 

* Oración a San Miguel Arcángel:

San Miguel Arcángel, defiéndenos en la batalla, sé nuestro amparo contra la perversidad y asechanzas del demonio. Reprímale Dios, pedimos suplicantes, y tú, oh, Príncipe de la Milicia Celestial, por el Poder que Dios te ha conferido, arroja al Infierno a Satanás y a todos los espíritus malignos que vagan por el mundo buscando la perdición de las almas. Amén.

309. ¡El que está en oración no caerá en la desesperación! — 16.10.2013

Mi hija. Ven a Nosotros siempre cuando tu tiempo te lo permita y quédate con Nosotros, es decir, mora con Nosotros, porque de esta manera te damos la fuerza necesaria para continuar tu trabajo en servicio de Nosotros.

Mi hija. Lo que viene a ustedes ahora hundirá a muchos de Nuestros hijos en desesperación. Serán los hijos que no viven según Nuestra Palabra, que no creen en Nosotros y que no se han preparado.

Habrá dos tipos de alegría visiblemente expresadas en los rostros de nuestros hijos: Primero, habrá la alegría íntima regalada (de Nosotros para ustedes) que viene del corazón y que surge sólo de la fe en Nosotros y la vida con Nosotros, la alegría de Nuestros hijos fieles – y luego habrá la alegría calculadora que surge del odio, regodeándose y deleitándose en el sufrimiento del otro, que se encontrará en los seguidores del maligno.

Mis hijos. Despierten y prepárense, porque sólo el que se prepara, el que está advertido y en oración no caerá en la desesperación, sino que lo entregará todo a Mí, su Jesús. Yo lo llevaré para él y proveeré para él y sus seres queridos, y será liberado de la mano del diablo que quiere tomar posesión de todos los hijos.

Mis hijos. Encuentren el camino hacia Mí, su Redentor, y pasarán por estos tiempos fortalecidos y con alegría en sus corazones, porque nadie puede apartarme de ustedes, por mucho que el maligno lo intente haciéndome desaparecer de sus iglesias y lugares santos.

Crean y confíen, ¡porque el que me ama me lleva en su corazón! Los amo, Mis queridos hijos.

Hasta pronto,

 

Su Jesús.
Redentor de todos los hijos de Dios.

 

«Mis hijos. Mi Hijo los está esperando. Su Padre en el Cielo. Creador de todos los hijos de Dios y Creador de todo el ser. Amén.»

«Vengan, hijos Míos, vengan, porque sólo así serán felices hijos del Señor. Los amo. Un ángel del Señor. Amén.»

308. ¡Nada es más importante que la oración en estos tiempos! — 15.10.2013

¡Su alma debe estar preparada para enfrentar Su pureza!

Mi hija. Mi querida hija. Vuelva a Mí. Te amo mucho. Nunca te pongas triste cuando otros te rechacen a ti y a tu trabajo. Es importante que difundas Nuestra Palabra, porque son tantos de Nuestros hijos que están siendo alcanzados por Nuestra Palabra en estos mensajes, se preparan y así no caerán ante Satanás, el adversario de Dios y el adversario de Mi Hijo Jesús, sino que serán salvados y ellos mismos luego salvarán a través de su oración, sus sacrificios, su aceptación y su SÍ a Jesús otros millones y millones de almas, porque cada hijo que se convierte, que encuentra el camino hacia Nosotros, él mismo empieza a hacer el bien a los demás, y así el número de los que se salvarán del maligno, cuyas almas estará a salvo, será cada vez mayor.

Mis hijos. No saben el alcance de la conversión de las almas, porque el número es mayor de lo que se pueden imaginar. No obstante, no es suficiente, porque el diablo con sus seguidores trabaja duramente para seducir a las almas fieles. Sus medidas son astutas, por lo que deben fijarse bien, ya que cuanto mayor sea la confusión en su tierra, más fácil será que se aberren.

Por eso les estamos pidiendo una y otra vez que invoquen al Espíritu Santo, porque ÉL les guarda del miedo y la confusión y mantiene su alma pura. Pero deben pedírselo diariamente, así que tomen las oraciones que les hemos dado por ese fin a través de María de la Preparación Divina de los Corazones.

Nada es más importante que la oración en estos tiempos para salvaguardarse de la confusión y contra los astutos intentos del diablo de atrapar a Nuestros hijos. ¡Su oración es el arma más potente que tienen contra todos los intentos del diablo! Tomen consciencia de esto una y otra vez y recen por ustedes mismos y por TODOS sus hermanos y hermanas.

Poco falta hasta que Jesús venga a ustedes, y entonces sus corazones deben estar preparados. ¡Su alma debe estar preparada para enfrentar Su pureza! Tomen esto a pecho, Mis hijos, ¡porque el que está manchado por el pecado y no se haya arrepentido no es puro para entrar en el Nuevo Reino! Por lo tanto, hagan penitencia y confiésense y oren que sean preservados del pecado.

Mis hijos. Jesús iluminará su conciencia y verán lo que aún deben limpiar [corregir]. Ésta es su oportunidad de realmente centrar su vida por completo en ÉL y de perseverar en los últimos días. Entonces Jesús vendrá por SEGUNDA VEZ, tal como se lo estamos diciendo una y otra vez, y los 3 días oscuros amanecerán tal como Dios Padre, Nuestro Señor, acaba de decirles. DESPUÉS de estos 3 días, se abrirá el Nuevo Reino, porque la limpieza de su tierra, la separación del bien y del mal, así como la batalla final habrá terminado, y la era de la paz pertenecerá a aquellos que se han unido a Jesús.

Mis hijos. Sabrán cuándo terminarán estos tres días, porque el sol saldrá con una luz que no conocen de este mundo. Sentirán la paz y experimentarán una maravillosa calma. Será una sensación de haber nacido de nuevo y su maravilla será grande y llena de alegría. Muchos de ustedes llorarán de emoción, porque lo que se les presentará es la maravilla de Dios. No debo revelar más por ahora.

Mis hijos. Los amo desde lo más profundo de Mi corazón maternal y espero con ilusión este maravilloso momento en el que el mal ya no existirá y todos los hombres vivirán en paz unos con otros. Será maravilloso. Crean y confíen.

Su Madre en el Cielo quien los ama.

Madre de todos los hijos de Dios. Con el consentimiento de Nuestro Señor Dios Altísimo.

 

«Mis hijos. Los amo mucho. Su Padre en el Cielo. Amén.» (Jesús sonríe.)

307. ¡Este es el mayor pecado de su tiempo presente! — 14.10.2013

Mi hija. Mi querida hija. Yo, tu Santa Madre del Cielo, estoy aquí para decirles que la tribulación ya ha comenzado.

Están en medio de ella, y sin embargo muchos de ustedes están como en un sueño profundo, no dirigiendo su atención a lo que es verdad, lo que está sucediendo en este momento, sino continúan refugiándose en los placeres y las compras, en los viajes y en «una vida hecha bella» sin darse cuenta que están perjudicando a sí mismos y a sus hermanos, porque cada quien no abre los ojos y los oídos a la verdad, quien permanece y queda en las apariencias y en el glamour, quien piensa en sí mismo, y sólo en sí mismo y en los suyos, sin pensar en todos los demás, sin ayudarlos y, si es necesario, ABSTENERSE, él contrarresta los esfuerzos de sus hermanos y hermanas, porque las oraciones de ellos son para todos los hijos y especialmente para aquellos que aún no han encontrado al Señor, que no han dado su SÍ a Jesús, que siguen ciegamente al maligno y también para aquellos que piensan que vivieran «bien y ordenadamente [correctamente]», pero que en realidad no conocen la verdad porque están envueltos en los velos de niebla del maligno, gozan de sus seducciones y se niegan a cambiar de vida, porque dicen de sí mismos tener un buen corazón y no ven que este buen corazón sólo se extiende hasta donde ellos estén bien personalmente.

Mis hijos. No han entendido lo que es el egoísmo, porque si lo entendieran serían más compasivos y mucho más cariñosos con los que no están tan bien como ustedes. Ya no se enriquecerían y sólo harían el «bien» para ustedes mismos, sino que compartirían. De ninguna manera se enriquecerían a costa de los demás, porque los que lo hacen están poseídos del diablo, y no hay excusa para tal comportamiento.

Es despreciado en el Cielo, es decir, aquellos de ustedes que se contaminan con este pecado necesitarán la mayor purificación y tendrán que hacer mucha oración, contrición y penitencia, porque el que «se de una buena vida» a expensas de sus hermanos y hermanas solo gozará de las glorias del Señor cuando se haya arrepentido, expiado y hecho remisión penal, es decir, debe reparar.

Esto lo puede hacer con la oración, con la oración ferviente. Debe volver a tener amor en su corazón por sus hermanos, y debe pedir con corazón contrito al Señor por el perdón de sus fechorías. Supliquen al Señor, si son culpable de este pecado, que ÉL vuelva a purificar su corazón y verter amor en su corazón y llenarlo de amor, porque sólo así se librarán de este mal del maligno, sólo así el diablo desistirá de ustedes y, con la ayuda del Cielo, se pondrán en el buen camino. Que así sea. Los amo.

Su Madre en el Cielo.
Madre de todos los hijos de Dios.

 

«Amén, les digo esto:

Este es el mayor pecado de su tiempo presente, y quien no lo lleve con corazón contrito al Padre nunca alcanzará el Reino de los Cielos.

Arrepiéntanse y hagan penitencia y sean buenos con sus semejantes, porque todos ustedes son hermanos y hermanas, porque todos vienen del único Padre.

ÉL que los ama tanto les pone paz y amor en sus corazones, pero han querido colocarse por encima de su Padre y vean lo que está sucediendo ahora: miseria y pecado, sufrimiento y necesidad y muchos corazones tristes que habitan en su tierra.

La verdadera felicidad la llevan solo muy pocos de ustedes en el corazón, y se han convertido en una sociedad del Yo. Arrepiéntanse y conviértanse, y regálenme su SÍ. Así las promesas también se harán realidad para ustedes, y entrarán en Mi Nuevo Reino como felices hijos del Señor.

Pero ¡ay de aquel que no quiera convertirse! El sufrimiento, la necesidad y el tormento del alma serán su herencia, porque el diablo «cuidará» de él, y esto significa el mayor de los tormentos.

Así que ahora vengan a Mí, a su Jesús, porque los amo a cada uno de ustedes desde lo más profundo de Mi Santo Corazón de Redentor, y a cada uno quien Me reconoce públicamente a Mi, le concederé la entrada a Mi Nuevo Reino.

Que así sea. Los amo.

Su Jesús.
Redentor de todos los hijos de Dios y Salvador del mundo.»

(Dios Padre asiente amorosamente.)

 

«Mi hija. Divulga esto. Con el «Amén, les digo esto» se evocan de manera especial una vez más las cosas importantes, por eso ayer Dios Nuestro Padre también usó esta figura de dicción, para que escuchen urgentemente y pongan en práctica lo que se ha dicho.

 

Vete ahora, Mi hija. Los amo. Su Madre en el Cielo.»

306. ¡Pueden evitar mucho sufrimiento si rezan en estos tiempos! !Vendrán tres días oscuros para los que deben estar preparados! — 13.10.2013

Mi hija. Mi querida hija. Disfruten del tiempo que les queda y lleven alegría en sus corazones. Demasiado preciosos son los últimos días de su tierra, por lo tanto, disfruten del estar juntos, disfruten de las salidas y disfruten del tiempo que pasan juntos.

Los amo, Mis tan queridos hijos, y Me regocijo en ustedes, su fidelidad, sus oraciones, su amor por Mí, por Mi Hijo, Dios Padre y el Espíritu Santo a quien cada vez más de Nuestros hijos se confían. Esta confianza es tan extremadamente importante porque les ayuda pasar por este tiempo de oscuridad, de la confusión y de no caer en las trampas del maligno.

No se dejen engañar, porque con cada engaño el diablo intenta apoderarse de ustedes, de su alma y de su corazón, con cada paso malo [error que cometen] el cree que se está acercando a su objetivo de dominarlos a ustedes, pero por su confianza en Nosotros no caen en las trampas cada vez más apretadas de Satanás, y así no se convierten en presa que él pueda devorar.

Mis hijos. ¡Manténgase fieles a Mi Hijo! ¡Confíen! ¡Crean! ¡Y disfruten de lo que tienen! Yo, su Santa Madre del Cielo, Me deleito en su alegría, Soy feliz cuando los veo felices a ustedes y los ayudo donde necesitan ayuda y Me la piden.

Así Yo también les pido que sigan rezando por Mí, porque Mi profanación no cesará durante mucho tiempo más. Estén atentos por la noche cuando los llamemos y entren en oración por Nosotros. Así evitarán mucho del mal que se Me están haciendo a Mí, su Madre en el Cielo, así frenan los actos infames que se están realizando contra Mi Hijo y frenan las misas satánicas que se celebran por la noche y que se dirigen, siempre en Nuestros tiempos -pero por la noche-, contra Nosotros.

Ustedes pueden evitar mucho sufrimiento si rezan en estos tiempos, ya que nada es más potente que su oración contra estas maldades y abominaciones que celebran los seguidores de Satanás en estas misas. Así que estén preparados para Nuestro llamado, porque de esta manera podemos prevenir mucho del mal que está planeado.

Mis hijos. Los amo. Desde las profundidades de Mi Sagrado Corazón maternal, y les prometo que el tiempo de la tribulación pronto terminará. Tengan paciencia y demuéstrennos su fidelidad a Nosotros, porque de esta manera Jesús los llevará con ÉL en Su Nuevo Reino cuando llegue el momento.

Los amo.

Su Madre en el Cielo.
Madre de todos los hijos de Dios, con el consentimiento de Dios Padre, Creador de todo el Ser.

 

«Mis hijos. Estén preparados en todo momento, porque sus oraciones son muy necesarias ahora. Prepárense para Nuestra llamada y síganla con oración. Yo, su Jesús, se lo agradezco mucho y les prometo que el tiempo de los días oscuros no perdurará por mucho.

Tengan confianza y permanezcan fieles a Mí, porque así podré liberarlos del dominio cada vez mayor de Satanás.

No teman nunca, porque Yo vendré y conquistaré y llevaré a todos los hijos fieles conmigo a Mi Nuevo Reino, porque tan grande es Mi amor por ustedes que no se perderá ni un solo hijo fiel.

Los amo con todo Mi Amor Divino.

Su Jesús.
Redentor de todos los hijos de Dios.»

 

«Amén», les digo esto:

El que no se de vuelta, 

que no se confía [reconoce] a Mi Hijo,

que siga pensando sólo en sí mismo y en su ventaja personal, no será salvado.

Las puertas del Cielo permanecerán cerradas para él, y el Nuevo Reino de Mi Hijo no será su hogar.

Por eso les digo: Vuelva mientras aún sea posible, porque pronto ya vendrá Mi Hijo, en lo alto del Cielo con todas las señales, y se librará la batalla final. Vendrán tres días oscuros para los que deben estar preparados, porque Yo, su Padre en el Cielo, usaré estos días para la última de todas las purificaciones.

El diablo (nota: los demonios) vagarán y capturarán sus almas, así que enciérrense en sus casas y no abran la ventana o puerta a nadie, porque los demonios son astutos e imitan las voces de personas que conocen para engañarlos y entrar en sus casas.

Sólo quién se haya preparado sobrevivirá estos días porque será una prueba dura. Deben permanecer en sus casas y no deben ceder a la curiosidad, sino que deben estar profundizados en la oración juntos con sus seres queridos.

Tengan velas preparados, velas consagradas, y tengan agua y pan en la casa. Preparen todo para estos 3 días, porque serán los últimos de sus días terrenales. Quien sobreviva estos días se irá con Jesús y la paz de los 1000 años será la suya. Tendrán un tiempo hermoso, serán recompensados grandemente, porque ésta es Mi promesa desde hace mucho tiempo.

Pero estén advertidos, porque estos 3 días serán terribles y extremadamente horribles. Tengan siempre fe y lleven sus objetos sagrados con ustedes, porque esto será su protección. Mi Sello los protegerá porque lo llevan en la frente. Pero tampoco deben aprovecharse [desafiar esta protección] y deben seguir Mis instrucciones, porque quien se atreva a salir caerá víctima de los demonios.

Así que estén preparados para estos días y preparen su alma para Jesús porque es EL quien los redimirá, porque su amor por ustedes es muy grande.

Que así sea.

Su Padre Todopoderoso en el Cielo.
Creador de todos los hijos de Dios y creador de todo Ser.

Amén.»

 

«El Señor ha hablado, así que prepárense. Escuchen lo que ÉL ha dicho y sigan Su llamada. Yo, el ángel del Señor, se lo digo. Un ángel del Señor.»