1401. ¡El Aviso! – ¡Regalo de la Divina Misericordia a toda la humanidad! — 20.02.2023
Mi hija. El Aviso será un hermoso acontecimiento para todos aquellos hijos que son puros de corazón.
Pero quien es pecador y sin arrepentimiento sufrirá, sufrirá, sufrirá.
Su preparación para este acontecimiento debe ser debida.
Es un acontecimiento sin precedentes y seguirá siendo único.
No habrá una 2da oportunidad, por eso su preparación es tan importante.
¡Aprovechen ahora este tiempo para traer ofrendas cuaresmales!
¡Vayan a visitar sus celebraciones de la Santa Misa y celébrenlas debidamente!
¡Purifíquense en la Santa Confesión!
¡Hagan penitencia!
¡Recen mucho por la conversión de la humanidad y especialmente de sus seres queridos!
Ustedes han recibido oraciones maravillosas, ¡utilícenlas!
Para este tiempo, ¡un pequeño acto de penitencia dada en los mensajes 1393 y 1394 es muy valioso! Recen estas oraciones, porque hacen mucho bien.
Mis hijos. Es importante que se limpien del pecado.
Los amo mucho.
Oren, hijos Míos, oren.
Su Padre en el Cielo.
Creador de todos los hijos de Dios y Creador de todo ser. Amén.
Sin la debida preparación, el Aviso los tomará por sorpresa y no lo percibirán como el acontecimiento que es: un regalo de Misericordia para toda la humanidad, un profundo y ferviente acto de amor para purificarlos y alejarlos del pecado y para encontrar completamente, puros y llenos de amor, a Mi Hijo. Amén.
Divulga esto, Mi hija. Los hijos deben hacer penitencia. Amén.
Tu Padre en el Cielo. Creador de todos los hijos de Dios y Creador de todo ser. Amén.
Las siguientes oraciones en particular se me muestran y mencionan en el Libro de Oraciones de la Preparación: Oración de Liberación No. 32, oración No. 33 y oración No. 34.
Para el Aviso mismo e inmediatamente después de él, les hemos dado oraciones en el Libro de Oraciones. Memoricen especialmente la oración por la salvación del alma (Oración de Liberación No. 32), para que puedan usarla si la necesitan, en caso de fallecer durante, a través o inmediatamente después del Aviso. De este modo no se pierde el alma que falleciera, -haya fallecida en consecuencia de shock.
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Oración de Liberación (en la hora de la muerte)
Oración No. 32 (mensaje No. 378 del 16.12.2013)
Querido Jesús. Me consagro Yo y mis seres queridos a Ti por completo. Por favor, ven y sálvame.
Amén.
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Apéndice:
Visión del mensaje No. 378 del 15 al 16 de diciembre de 2013
Visión del infierno
A las 3 de la madrugada me despiertan para rezar la Coronilla de la Divina Misericordia. Durante la oración repetitiva experimenté lo siguiente:
Visión
Los demonios quieren tirarme al infierno. Están a mis lados y detrás de mí. Veo el infierno debajo de mí, luego veo cómo se abre. Su entrada es a través del lago de fuego, que es un remolino que tira hacia abajo. Allí, estos demonios me quieren empujar. Me resisto con todas mis fuerzas, grito, porque me entra pánico. Los demonios no logran empujarme, así que se van y, luego, el diablo mismo está detrás de mí. Suplico al cielo. Jesús me invita a mirar el infierno, a visitarlo, pero solo siento pánico y shock y le digo que lo haría por ÉL, pero si es por mi misma no quisiera ir allí. Siento la mayor agonía, miedo con pánico, y Jesús respeta mi decisión. En este momento, se me envía la oración de liberación. La rezo una y otra vez, y Jesús con Dios Padre y la Madre de Dios se me muestran claramente. Estaban presentes en todo momento, pero no podía verlos todo el tiempo. Son las 4:39 a.m. cuando termina la visión. La Madre de Dios dice: «Esta es una oración de liberación. Órenla».